Voyage initiatique 1961


A la memoria de Jean Luis Marcos de su primo Carlos

Con mi primo Jean Louis no fue, de todos los componentes de mi querida
familia de Francia, con el que mas contacto he tenido a lo largo de la vida, pero por
él sentía un afecto diferenciado dada la especial relación, que al menos
para mi, tuvimos en aquel lejano verano de 1961 en que viaje, desde
Madrid, con mis tíos y primos, a Francia.

Jean Louis, era el primo de mi misma edad, había otros 3 algunos años
mayores y uno 2 años menor, mucha diferencia en esas edades. De esta
forma nos convertimos, como decimos aquí, en “compañeros de fatigas”
de aquel verano, que para mi fue ciertamente de iniciación.

Para un joven de catorce años, que no había salido del ámbito familiar, en
un país como la España de principios de los 60, este viaje fue “mágico”;
en aquellos años pasar la frontera de Francia desde España era cambiar
de mundo, la gente era diferente, vestía distinto, los coches, las casas, las
carreteras (las había de pago¡¡¡¡) nada que ver con lo poco que yo conocía
de mi país ; vi por primera vez el mar, estuve en las playas de Grau de Roi,
viviendo en la caravana y en tienda, montamos a caballo en la Camarge,
fuimos a Antibes, descubro Picasso para mi hasta entonces un perfecto
desconocido,Nimes, Toulouse,….; tuve conocimiento de cantantes tan
diferentes como J Holiday o Petula Clark que vimos en una actuación en
directo; después la casa de Aubin, allí aprendí a montar en bicicleta, la vida
cotidiana de jóvenes franceses de mi edad, las chicas, y muchas otras cosas.

En esta cascada de nuevas y en muchos casos fascinantes e incompresibles
experiencias, el confidente, el cómplice, el intérprete de primera mano,
fue Jean Louis. También tuvimos algunas peleas y enfados, recuerdo
algún enfado por mi incapacidad de pronunciar adecuadamente el francés
que constantemente se esforzó para que aprendiera. Todo ello está en mi
recuerdo.

Después alguna visita a Madrid, hace más de 20 años donde recorrimos
algunos museos y exposiciones, en las que disfrute de sus conocimientos
y sensibilidad en unos temas que aunque me resultan de interés soy lego.
También recuerdo mi visita a su casa de Marsella de paso en un viaje
hacia Africa.

Nos vimos en febrero del año pasado en la celebración del centenario de su
padre. Cuando nos despedimos, creo que los dos éramos conscientes de que
con mucha probabilidad no nos volveríamos a encontrar.

Nos quedó pendiente algo, el viaje a los pueblos de la Mancha y Córdoba
de donde eran originarios nuestros abuelos. De alguna manera no
dejaremos de hacerlo.

Carlos Moreno

Madrid, abril de 2013

Aucun commentaire:

Enregistrer un commentaire